El centro de la ciudad de Sóller está rodeado de verdes montañas y frondosos valles. Las calles empedradas y los edificios de piedra típicos de la ciudad añaden un encanto extra al ambiente tranquilo de Sóller. La ciudad también es conocida por sus numerosos jardines y parques, como el Jardín Botánico y el Parque Municipal, que invitan a los visitantes a relajarse y disfrutar de la naturaleza que los rodea.

Sóller tiene muchas atracciones culturales para explorar, incluido el Museo de Arte de Sóller, el Museo de Historia Local y la Galería de Arte. La ciudad también alberga varias iglesias históricas, como la Iglesia de Sant Bartomeu y la Iglesia de Sant Domingo, que merece la pena visitar por su arquitectura e historia.

Finalmente, el pueblo de Sóller también es famoso por su gastronomía local, con muchos restaurantes que ofrecen cocina tradicional mallorquina y una variedad de platos elaborados con productos locales. Los mariscos frescos, las aceitunas, los cítricos y los vinos locales son particularmente populares entre los visitantes.

Una de las joyas ocultas de Sóller es su antiguo tren que atraviesa la localidad y sus alrededores, ofreciendo al viajero una experiencia única e inolvidable. Conecta Sóller con Palma de Mallorca atravesando magníficos paisajes y pintorescos pueblos. Este tren, con sus originales vagones de madera, te transportará en el tiempo.